Mi carta de presentación

En el mundo existen alrededor de 7000 millones de personas, dentro de ese número de personas hay una llamada Samantha. El sueño de ella siempre ha sido que cada persona en la faz de la tierra sepa de su existencia. Sus grandes héroes son Elon Musk y Melinda Gates, debido a que hacen muchas cosas en beneficio de la humanidad. Un día, tuvo la oportunidad de escuchar a Melinda mientras un reportero le hacía una entrevista:

-Melinda, ¿Qué le recomendarías a esas chicas que quieren ser tan conocidas como tú?

-Sencillo, solo deben desarrollar su marca personal.

Samantha nunca había escuchado de esta palabra, en sus tiempos libres decidió buscar más acerca de esta gran unión de caracteres.

Cada día encontraba cosas fascinantes sobre este término. Sabía que la marca personal era el lenguaje con el que le percibían las demás personas, podría llegar a revelar sus aptitudes y a partir de estas poder definir su esencia. 

Cuando ya aprendió sobre que era marca personal comenzó a desarrollar su propia marca, su propia esencia. Comenzó definiendo sus objetivos, el tipo de personas que quería que la conocieran, la forma de transmitir su mensaje; también definió su propia imagen con un logotipo único para ella, planificó sus acciones y decidió dar su salto a la fama. Finalmente, decidió enviarle un correo a Melinda pidiéndole que evaluará su marca personal.

Buen día Melinda,

Te escribo este correo porque soy una gran admiradora tuya y un día escuche que si alguna joven aspiraba a ser como tú debería tener una gran marca personal. Yo apenas estoy comenzando y quiero que puedas evaluar mi marca personal para saber si voy por buen camino.

Gracias

Samantha espero semanas a que Melinda respondiera, justo cuando se iba a rendir Melinda respondió:

Hola Samantha,

Eres una joven muy decidida al escribirme, tu marca personal es impecable, pero le falta algo muy importante. Cosecha más triunfos para hacer de tu marca algo gigantesco. Vas por buen camino.

Atentamente,

Melinda Gates

Este fue el camino que Samantha tomó y está cumpliendo su sueño, y tú ¿Qué esperas para desarrollar tu marca personal?