Temperamentos controlados por el Espíritu

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En la medida que vamos creciendo, vamos experimentando tanto cambios físicos como emocionales, y la amplitud del crecimiento está limitado por la capacidad de enfrentar hechos y/o acontecimientos que diariamente se van presentando, sin necesidad de buscarlos, simplemente, son hechos que en la cotidianidad nos lleva a estas situaciones que confronta especialmente nuestro perfil emocional.
Porque, siempre vamos a estar en situaciones que puedan causar una incomodidad o nos lleve a tomar una decisión al respecto, sin necesidad de buscarlas? Esencialmente, porque somos personas con variables en pensamiento y sentimientos totalmente diferentes, no estamos en riesgo de encontrarnos con nadie que se parezca 100% a nosotros, además el mundo no nos clasifica en personas más parecidas por sectores para que de esta manera podamos evitar mayores impactos.
Cuando Jesús vino al mundo nos mostró que no es necesario trabajar o crear una relación estrecha únicamente con las personas que al menos a primera vista sean muy semejantes a nosotros. Él escogió a sus 12 principales con los que estaría el mayor tiempo de su servicio y dando una enseñanza significativa y de impacto; y, cuando lo hizo no buscó a personas que fueran de servicio a Dios, no eran sacerdotes, tampoco tenían la formación o la posibilidad de tener una gran educación o que su forma de vida fuera parecida o cercana a lo que él vivía, solo tuvo el carácter y el firme propósito de cumplir su misión con los 12.
Que quiero decir con esto? Simplemente que si nuestro modelo de vida es Jesús, debemos estar atentos a cada señal que nos ha venido entregando mediante sus enseñanzas, él tenía una misión y la cumplió, tuvo problemas con la gente, satanás se presentó para tentarlo en su momento más vulnerable y él pasó la prueba. Como lo hizo? Él tenía la claridad que el ser humano no fue diseñado para estar solo, existe una necesidad de dependencia a seguir sea lo bueno o lo malo, y debido a esto, no permitió que sus pensamientos, sentimientos lo controlen, sino que cuidó cada situación ejerciendo control en todo tiempo. Pero como ya lo señalamos, el ser humano no puede solo era necesario estar lleno del espíritu santo para que fuera él quien lo ayudará en conservar su vida consagrada a Dios.
De la misma forma estamos invitados a proceder en cada situación, sin importar lo que se presente, nosotros no estamos capacitados, pero sí podemos establecer esa comunión con el espíritu santo para tener la seguridad de esperar en él.

Yasmin Montañez

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1 Comentario
Maria Paula
Maria Paula
3 años

Que linda reflexión ! En ocasiones olvidamos la importancia y la necesidad innegable en nuestras vidas que representa la dependencia al Espíritu Santo! 🙏🏽 Gracias por compartir